En esta entrada vengo a hablaros acerca de Charles Dickens y su obra Oliver Twist, obra que el autor utiliza con afán de criticar el abandono de la sociedad de las personas indefensas y la falta de implicación social en estos temas.
Tras leer un fragmento de la obra en el que se narra el nacimiento de Oliver Twist, niño huérfano, clase social que le es asignada pues su madre fallece tras un parto complicado y no se tiene noticia alguna de su padre, y que perdurará durante toda su vida. La intención del autor es hacernos reflexionar mostrándonos que cuando nacemos todos somos iguales y que es el origen de nuestros padres lo que determina nuestra clase social y cómo será nuestra vida, aunque nosotros no hayamos hecho nada para merecerla.
AUTOR:
Más sobre la vida de Dickens |
Escritor británico. En 1822 su familia se trasladó de Kent a Londres, y dos años más tarde su padre fue encarcelado por deudas. El futuro escritor entró a trabajar entonces en una fábrica de calzados, donde conoció las duras condiciones de vida de las clases más humildes, a cuya denuncia dedicó gran parte de su obra.
Autodidacta, si se excluyen los dos años y medio que pasó en una escuela privada, consiguió empleo como pasante de abogado en 1827, pero aspiraba ya a ser dramaturgo y periodista. Aprendió taquigrafía y, poco a poco, consiguió ganarse la vida con lo que escribía; empezó redactando crónicas de tribunales para acceder, más tarde, a un puesto de periodista parlamentario y, finalmente, bajo el seudónimo de Boz, publicó una serie de artículos inspirados en la vida cotidiana de Londres (Esbozos por Boz).
El mismo año, se casó con Catherine Hogarth, hija del director del Morning Chronicle, el periódico que difundió, entre 1836 y 1837, el folletín de Los papeles póstumos del Club Pickwick, y los posteriores Oliver Twist y Nicholas Nickleby. La publicación por entregas de prácticamente todas sus novelas creó una relación especial con su público, sobre el cual llegó a ejercer una importante influencia, y en sus novelas se pronunció de manera más o menos directa sobre los asuntos de su tiempo.
OBRA: OLIVER TWIST
La obra cuenta la historia del pequeño Oliver, criado en un hospicio, empleado y maltratado en una funeraria, que al escapar rumbo a Londres es reclutado por una banda de ladrones que él no reconoce como tales, no sólo es un soberbio escaparate de celebérrimas creaciones dickensianas (Fagin, el jefe de la banda de delincuentes juveniles, el ladronzuelo Jack Dawkins, el asesino Sikes, la prostituta Nancy, el misterioso Monks, implacable perseguidor de Oliver), sino un magnífico y trepidante relato sobre la inocencia acosada.
Los distintos protectores que el héroe va encontrando en su camino nos descubren al Dickens idílico y sentimental y gracias a ellos una trama de secretos tan dramáticos como finalmente felices.
EL DESARROLLO DE LA SENSIBILIDAD Y EMPATÍA EN LOS NIÑOS Y NIÑAS
Hoy en día la sociedad se encuentra bastante avanzada en cuestión de igualdad entre niños y niñas, pero aún no ha llegado a reflejarse en todos los hogares del mundo.
Muchos padres y madres enseñan tanto a sus hijas como a sus hijos el cuidado de las cosas y seres vivos y el cariño que hay que poner en ellos, lo que ayuda a desarrollar su sensibilidad y empatía.
La empatía es una cualidad muy importante y necesaria que todos los seres humanos deberíamos poseer, pues nos permite salir de nuestro egocentrismo y sentir lo que otra persona siente poniéndonos en una situación ajena a nosotros. Desarrollar esta cualidad en los más pequeños les aporta grandes beneficios tales como el conocimiento de las propias emociones y sentimientos, gracias al cual podemos controlar nuestros actos en cualquier situación. La empatía es muy necesaria a la hora de relacionarnos con los demás, pues nos permite simpatizar con ellos, mostrar preocupación y compasión; además esta cualidad les ayuda a eliminar la violencia como respuesta, pues al ponerse en la piel de la otra persona, su impulso será ayudarla.
Al igual que la empatía, desarrollar su sensibilidad emocional es una gran ventaja para ellos, pues mejora su desarrollo, aumenta su afectividad, les aporta capacidad de reflexión e incluso mejora su propio estado de ánimo. Por ello si los seres humanos no desarrolláramos estas cualidades, las relaciones entre nosotros serían bastante complicadas pues solo pensaríamos en nosotros mismos.
Por otro lado pese a que la sensibilidad y empatía nos aportan grandes beneficios y hacen nuestras relaciones sociales más fáciles también debemos reconocer que una empatía excesiva hacia los demás puede llegar a perjudicarnos, pues nos puede alejar de la búsqueda de nuestra propia felicidad si solo pensamos en lo que hará feliz a los demás.
Dar a los niños y niñas estas cualidades ayuda a crear en ellos personas felices de un modo más amplio, pues además de por su felicidad serán felices por la felicidad de sus seres queridos.
Por otro lado pese a que la sensibilidad y empatía nos aportan grandes beneficios y hacen nuestras relaciones sociales más fáciles también debemos reconocer que una empatía excesiva hacia los demás puede llegar a perjudicarnos, pues nos puede alejar de la búsqueda de nuestra propia felicidad si solo pensamos en lo que hará feliz a los demás.
Dar a los niños y niñas estas cualidades ayuda a crear en ellos personas felices de un modo más amplio, pues además de por su felicidad serán felices por la felicidad de sus seres queridos.
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